Este jueves !un relato! TAUROMAQUIA- "La isla de las mujeres"

Por la mañana el toro estaba con las patas delanteras dobladas, apuntillado, la garganta y los ojos abiertos. A Kritia le daba pena su mirada de cristal empañado, con aquellas largas pestañas, recibiendo moscas, hormigas y avispas. Se iría incorporando poco a poco al seno de la Madre que anoche bebió su sangre. Se fundiría con las aves, los topos, los zorros y los insectos, dándoles alimento. A Ella, Natura que lo engendró, regresaba, como todo.

Los ritos en medio de la oscuridad frente a la piedra, jamás los olvidaría, se acompañaron de ofrendas en forma de frutos, vino, aceite, incienso, azafrán, guirnaldas trazadas con las primeras flores, bailes y oraciones. Tenían el sentido de una ceremonia que se remontaba al inicio de los tiempos.

A lo largo de la noche experimentaron el vértigo del columpio, de la danza en círculo. Recibieron los sueños aspirando a través de un embudo, aplicado a la piedra de adormidera, herida con un cuchillo al rojo. La niña Kritia supo que la Madre se les hizo presente, notó su epifanía, su hálito, su esencia, en la paloma posada sobre la doble hacha. Al unísono la anciana traducía el mensaje con los ojos cerrados, la voz cavernosa, pronunciando el remoto idioma que aún no olvidaban. De un cesto sacó dos serpientes que le besaron el cuello con sus lenguas bífidas y se le enroscaron en la cintura y en los brazos, sin dañarla, después bajaron por su quíntuple falda y reptando, desaparecieron en la oscuridad.

Cuando cercenó la garganta del toro, la vieja lloraba y reía a la vez, mojándose la cara y los pechos con la sangre de la bestia, luego le besó la testuz y los ojos. Un hombre piadoso había escogido al animal de su propia manada, cerciorándose de que fuera el más hermoso, la piel moteada. Lo trajo atado con una cuerda sujeta al aro de plata que le pasaba por el hocico. Vino inusualmente manso, como si adivinara su destino sagrado, pero en cuando presintió a la gente se puso nervioso y entre cinco lo derribaron para amarrarle las pezuñas.

Con la luna en lo alto, dibujando los cuernos, soltaron al animal que dio brincos de alegría. Era el momento...

El muchacho de ojos rasgados fue el único capaz de saltar por encima de la espalda de aquel toro de cuatro años, temible y poderoso que avanzaba levantando tierra y piedrecillas, en medio del pasadizo hecho con escudos. Al verse en el centro del claro, rodeado de antorchas, el animal escarbó con las pezuñas, olía la tierra y resoplaba. Dando un impulso increíble, el joven voló entre los cuernos en forma de lira y casi sin apoyar las palmas en el lomo, cayó de pie, límpidamente, mientras la cola del toro fustigaba el aire y le azotaba las mejillas. Rito de iniciación, de homenaje al animal masculino, tentando a la muerte antes de empezar la vida ¿cómo olvidarlo? sería aventar las cenizas de los padres y las madres, pisar el corazón de la isla y los ojos del tiempo.

En ese preciso instante, Kritia lo escogió para amarle; era perfecto, exacto a uno de los adolescentes de la antigua pintura en el palacio de Knossos; piel atezada, ellas blanca cual leche, saltando el toro, acróbatas los tres de viento, elásticos pájaros de largas trenzas, oscuras plumas de jaspe.

Texto: Fragmento adaptado de mi novela "La paz de Troya"

Imagenes Museo de Heraklion (Civilización Minoica, aprox. 3000 a 1400 a.C.) Creta:

1- Rhyton, cabeza de toro; cristal de roca los ojos, jaspe la piel, y oro, los cuernos.

2- La Sacerdotiza de las serpientes- Terracota policromada.
3-Diosa coronada de adormideras- Terracota.

4-Fresco del palacio de Knossos, rito de la juventud saltando el toro.

5-Terracota polícroma- "La epifanía del columpio". Esta pieza no describe un juego, habla del vértigo místico en los ritos, cuando la Madre se hacia "presente" en forma de dos palomas.
6-Dos vasos de oro con relieves: escena de toro embistiendo saltadores y captura del toro en el campo.

ARRECIFE ha levantado el escollo coralino.

Toros de pintas y pelajes diversos, donde GUS:http://callejamoran.blogspot.com/