7 de octubre de 2010

Los jueves un relato: Pág. 24, línea 3

“El hijo del viento” Henning Mankell

Página 24, línea 3:
“El año siguiente aprendió todo lo que ahora sabía sobre los insectos...”
Estaba repasando su magnífica colección con la lupa, milímetro a milímetro ¡cuanta belleza! suprema exquisitez.

La luz blanca del flexo enfocaba las alas del coleóptero, quitinosas e irisadas apenas flambeadas con un toque de jugo gástrico díptero.
Luego, sin dilación dispuso el acompañamiento; espuma baba de caracol “helix promatia” y polvo de virutas ojos de libélula, como caviar Beluga, ni comparación con las horteras cabecitas de hormiga roja del amazonas ¡sucedáneos!
Le faltaba el plato fuerte, no podía fallar en eso, la competición estaba al rojo vivo, lo mismo que los fogones, los chefs y las envidias, los plagios y los jurados suspicaces. “Pandilla de Michelines fatuos”mascullaba entre dientes.
Recapacitó para darse un respiro.

Soplador en mano, miraba ensimismado la delgada llamita azul:
“Infinitas probaturas papilares, meticuloso empeño en las texturas y en los acabados, siempre, sobra decirlo, presentados reposando en la impecable hoja de papel de arroz chino hecho a mano, los alfileres de oro sujetando cada maravilla, el cristal de roca esmerilado formando una campana que la cocción al punto entela, ligeramente”
Se le abría el apetito a cualquiera, estaba comprobado.
Aplicó la llamita con decisión no exenta de sensibilidad, un segundo y dos décimas justas, encima del timbal formado por los seis escarabajos Goliath tropical bicolor, B/N, sin dañar los élitros delicadísimos. El toque final: hojas y palos insecto evocando tronquitos de canela. La composición era un cuadro minimalista, nada animal, tiraba a entomología sintética.
El aroma le invadió las narices y ensalivó de puro placer, parpadeó de gozo. Corría "el hijo del viento" venido del mismísimo extractor de humos, silencioso y refrescante.
Antes de cubrir las delicias con la media esfera cristalina, espolvoreó un suspiro "glasse" tela de araña, cubrió con una ligera mousse a la gelatina de crisálida y destellos de luciérnaga. Para rematar, dos alas de mariposa nocturna colocadas como sin querer, casuales, escarchadas.

__ ¡¡Oído cosina!! Bocata calamares, dos sesos salteados, cuatro chipirones, dos huevos morcilla, tres arroz leche y tres leches fritas...
__! Marchando!__ gritó antes de tragarse la cucaracha común que se escondía entre los mejillones. Había probado mejores.
______________________
Nota: En el Mercado de la Boqueria de Barcelona vendían esas delicadezas insectívoras, me parece que cerraron el puesto por falta de sensibilidad culinaria. Añado; tamaño desaguisado es culpa de H. Mankell.
Páginas. 24, líneas 3, se leen donde GUS http://callejamoran.blogspot.com/

29 comentarios:

Primavera dijo...

Joper como me haces esto, estoy desayunando que ascooooooooo se nota que te gusta esos bichitos eh, estas wenosss eh, como hay tantos los puedes hacer a la parrilla, o rebozados con espuma de caracoles...ja ja
Estas delicadezas ni tan siquiera en lugares de origen que estan acostumbrados por mi parte pasaba y mejor era no verlos eh, porque en seguida mi cuerpo reaccionaba de forma poco ortodoxa por aquellos lugares, claro que se hacen otras peores pero claro no era una blanca bien blanca.
Primavera

Mar dijo...

Tus textos a veces me dejan... ¿Pero de dónde sacas todo este saber de insectos? ¿Cuántas horas te ha llevado esto? Perpleja, me dejan perpleja. Imaginación, elaboración, sentimiento... ¿Qué creatividad! ¡Y qué curro! Pero ¿de qué va ese libro?
Oye, paso a mirarme lo de los pies ahora. No he tenido tiempo para variar, hasta ayer. ¿Por qué ayer sí? Baja. Una afonía vírica me impide hablar y por eso no puedo dar clases.

Pero de voz/ voces internas no me faltan, ¿eh?!
Besitos.

Alfredo dijo...

Reconozco no tener la sensibiidad culinaria suficiente para adentrarme en ese mundo de insectos o lo que sean, comestibles que en muchos países son una fuente importante de proteínas.

Un abrazo!!

Alfredo dijo...

En ese sentido siempre me he sentido más cerca de Pepe Carvalho.

Inma Brujis dijo...

Como dirían Timón y Pumba... ¡¡¡viscoso pero sabroso!!! puaggggggggggg.
Besos de brujis

yonky dijo...

Yo estoy dispuesto a saborear esta propuesta,en fin,el empeño y meticulosidad puesto en su preparacion todo lo vale.

Ya fui carnivoro,luego vegetariano,tal vez despues....

Una delicadeza el acompañamiento musical

Alfredo dijo...

El placer de la contemnplación es, a veces mayor que el de la degustación. En este caso adivino que ambas con supremas. Un buen cuadro con colores y texturas atractivas y un mejor plato con sabores y olores del otro mundo, todo ello para disfrute del atrevido experto.

Hasta que la realidad le despierta y le devuelve a lo convencional, lo común, lo de todos...

Me lo llevaría para encabezar la carta de un restaurante de "Autor"

(Nosotros, nos conformaremos con el peixet y el senyoret)

Besitos

Teresa Cameselle dijo...

Qué culpa tendrá el bueno de Mankell del desa-guisado. A quién se le ocurre, insectos, cucarachas, telas de araña, crisálidas... ¡Nada de eso es comestible! Digan lo que digan, jaaja.
Original relato, Natalia.
Bicos.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

No, si lo que no mata...engorda.

Delicioso final ese "oido cosina"; irónico y estupendo post, amiga.

Me gustó mucho.

Un abrazo enorme.

Gambetas de lana dijo...

Tu manera de relatar y describir es sublime. Con respecto al menú me quedo con un buen bife de chorizo con papas fritas.
Repito una pregunta anterior ¿De dónde sabes tanto de insectos?
Besos

CARMEN ANDÚJAR dijo...

Ostras chica, de bien presentado seguro que está; pero bueno no se, no se, sólo de pensar en la cucaracha y las hormigas me da algo.
Muy divertido e imaginativo Natalia.
Un beso

Anónimo dijo...

La excentricidad de la alta cocina, no parece tener límites. Nitrógeno, oro, arcilla,etc., pero eso sí: pedacitos de algo naufragando en un enorme plato, perfectamente presentados. ¿De verdad hay quien así se alimente medianamente bien?. En cuanto a la comida de base insectívora, los chinos llevan siglos cultivándola y, al parecer, con éxito.
Precioso relato, Nátali.
Un abrazo.
P.D.- Me olvidé decir que me apunto al bocata de calamares.

Any dijo...

Ajjjjjjjjjjjjjjj!!!!!! Me vino a la memoria el cuento de Cortázar, "Circe", si no lo leíste te lo recomiendo, Delia debe ser pariente de este tipo!
Siempre me asombra tu imaginación y tu vocabulario a la hora de redactar, sos una master.
Eso si, si voy por España comeré en Mc Donalds o me llevaré mis propias provisiones ... a un restaurant no voy ni loca ahjajajjajaj!
;)

un beso

María José Moreno dijo...

O sea querida diosa que ademas de romanos entendemos de insectos en todas sus variadades. Eres una caja de sorpresas y me sorprendes en cada uno de tus estupendos relatos. Me adhiero a Pepe "sos una master".
Yo por si me quedo con el bocata de calamres...jajaja
Besos

maruja dijo...

Un poquillo de repelús si que me producen las cucarachas maca. Pero todo me vale si es buena M literatura, como la tuya (perdón por el ripio).
Los chinos, los mejicanos, los españoles, tenemos exquisiteces y alimentos que a otros pueden parecer repugnantes.
Mi querida Any si no comes en restaurantes españoles, no sabes lo que te pierdes.

Anónimo dijo...

ACABO DE DCIDIRLO AHRA MISMO...ACABAS DE GANARTE UNA INVITACION A COMER. PERDON, ACABAIS DE GANAROS EL SEÑOR BARBAS Y TU UNA INVITACION AL PASADO DE MI PUEBLO, AL PASADO CULINARIO DE MI PUEBLO, CUANDO LOS GATOS HUIAN DE LOS SERES DE DOS PATAS, DE CUANDO LAS MULAS Y LOS BURROS ERAN DSTRIPADOS EN PLENA TIERRA Y DEJADOS MRIR Y SUS RESTOS IBAN A APRAR A ...ESTOS, LAS MULAS Y LOS BURROS NO HUIAN DE LOS SERES DE DOS PATAS COMO LOS GATOS, TAMPOCO LOS MARANOS MUERTOS QUE ERAN TIRADOS POR LOS CAMPOS NI LAS OVEJAS Y SIMILARS...MAS, TODO ESTE TIPO DE CARNE, A LO QUE ME HAN CONTADO,. ERA PLATO DE....
AGGGGG
MAS , AGGG, AHORA, SE, COMO TU, NATALI, QUE ESTAS ASQUEROSIDADES FUERON MANJARES EN SUS TIEMPOS.
BESOS DE DELICADOS LABIOS PARA VOS.

Any dijo...

Claro mi querida Natali, era broma. La cocina española es mmmmmm!!! estupenda. Con algunas diferencias por el tiempo y la distancia, es nuestra cocina también, junto con la italiana. Por supuesto que si voy por alli iré de restaurant en restaurant y volveré con 10 kg mas, pero feliz. De paso te invito y nos tomamos unos vinos a la salud de Quinto querés?
un beso

Javier Muñiz dijo...

Hola, que bella entrada, preciosa,eres muy amable, un placer contar contigo, gracias, pasa buen viernes, besos...

Myriam dijo...

jajajaj de ninguna manera comería insectos..... ujjjjj pero los chipirones en su tienta me encantan!

Besos y muy buen fin de semana.

iñaki zaratiegui dijo...

Con estas letras se puede cocinar cualquier cosa.

Un abrazo Natalia.

I. Robledo dijo...

Amiga, no podrias ofrecerse una tapita de ensaladilla rusa... Aunque sea del Mercadona...

Si, ya se que es algo muy prosaico, pero es que a uno los bichos exquisitos le producen picores... Debe ser alguna alergia... Quizas producto de alguna carencia infantil...

Quedo alucionado, tras leer tus palabras.

Un abrazo fuerte, Natalia

Unknown dijo...

Querida Natalia:

Vengo a agradecerte el regalo que para mí han supuesto las palabras que, en forma de comentario, has dejado en tu blog, y, de paso, a felicitarte por el dominio de la prosa que tiene tu pluma... Te confieso que mi pluma también prefiere la prosa, pero mi corazón ama la poesía, y, aunque sea prosa poética a lo más que llego, era un deseo del pleistoceno (jajaja) el que tenía de abrir un un rinconcito poético... Y, por si te animas, quiero decirte que sus puertas y las de mi corazón, están abiertas de par en par para ti, por si otro día te apetece venir a visitarnos... Aprovechamos entonces, tomamos un café y charlamos un poquito...

Un beso y una flor

Un par de neuronas... dijo...

Joéeeee... entre tú y Gustavo me habéis cortado el apetito, entre cucarachas y burros despanzurrados!!! Chicos ¿nos os van mejor unas berengenas al horno?
Y con la imaginación que yo tengo... joéeeeee!

PD: Muda sigo con las noticias de Perú. El humano es criminal por naturaleza. Los demás tenemos miedo a las penas capitales.

Natàlia Tàrraco dijo...

Amigas y amigos, a partir de la pág. 24, línea 3, según la norma del jueves, como todo quisque, me inventé la gastronomía del insecto. Me daba pie el Mankell, no tenía más opción y me gustó degustar esos platos.

La broma irónica sobre la cocina "nueva" comparada con la entomología me pareció como un anillo a mi dedo (son retorcidos minimalistas, esos exquisitos). El divertimento entre el soñar y la realidad, confundir ambas cosas, muy oportuno. Cada cual sueña sin tapujos, a escote, líbremente, y mi personaje hace eso, se inventa chef refinado inspirado en las cucarachas que le rodean cada día !dura vidilla!. Escapa de la realidad del "bocata calamares" Por cierto !sublime manjar! Póngame una de tortilla patatas jugosa...pído; "cosina".
Rarita soy escribiendo, me da por ahí y me divierto. Gustosos los escarabajos al pil pil, pero prefiero "peixets petitets"
Cada JUEVES un reto sin llegar a las manos, que no hay para tanto. Nos leemos, nos interpretamos, escribimos ¿qué más queremos compis?
Saludos del pobre Mankell, que de pobre naaa, menuda la novela, insectos incluidos que son lo de menos, cosa suaaave ellos, muertitos en su álbum, lo que sigue tiene tela o letra.
!Ave! gracias por no hacer remilgos a mi menú de este jueves. Besitooooooos con regusto a...

Ricardo Miñana dijo...

Hola Natalia escribes unos textos con imaginacion y tu buen arte.
siempre es un placer pasar a leerte.
que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.

estoy_viva dijo...

Madre mia podria haber leido este relato en otro momento pero estoy tomando el desayuno, que repugnancia me han dado estos bichitos que algunas personas disfrutan tanto.
Sobre lo que dices en mi blog, es cierto desconozco el autor, me lo enviaron por correo asi, voy a mirar por el santo google si averiguo de quien es...
Feliz domingo
con cariño
mari

Minombresabeahierba dijo...

Me dio apetito, veré que encuentro en la cocina.

Estaba pensando en agregarle una salsa de roquefort.

Besotes

Susurros de Tinta dijo...

Jopelines!!!, asi contado hasta a mi me dan ganas de comer insectos, y que conste que no es por la dieta extricta a la que me tiene sometida el endocrino ese que seguro que está pagado por algún enemigo mio, jajaja, que relato tan intrincado de nombes que me suenan a chino, le diré a mi pececillo que me los traduzca, jajaja, miles de besossssssssssssssss.

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Natàlia,

Esta sabrosa y bien detallada descripción, aunque por momentos nos quite las ganas de comer, nos trae a la memoria la confirmación de que la belleza existe en todas partes: lo que a veces nos faltan son ojos para verla. Seguro que ese manjar hecho a base de insectos está exquisito y sabroso y más de uno nos lo comeríamos, si nos dijesen que es de langostino o cualquier otro marisco. Y esto pasa porque lo que domina en nosotros es el pensamiento y los prejuicios, no la auténtica esencia de las cosas.

¡Qué pena que ya estas cosas no se puedan adquirir ya en el Mercado de la Boquería!

Ahora, para cambiar un poco de tema, me voy a desayunar y me tomaré un buen bocadillo de deliciosa salchicha hispánica.

Un abrazo,

Antonio